“PREPARANDO A MI HIJO PARA LA VIDA”
Enseñar
a nuestros hijos estrategias para una efectiva inclusión, es prepararlos para
la vida.
Cuando
los padres esperamos la llegada del nuevo miembro de la familia, existen expectativas, ansiedades, sueños …
Con
el tiempo, los padres observamos que “algo raro” pasa, vienen las consultas:
pediatra, otros profesionales, padres, amigos. Así comienza el camino en busca
de respuestas. Hasta que llega el diagnóstico, y con él crisis, se genera
angustia, depresión, malestar, se termina de “golpe” todo lo soñado y
planificado para ese hijo. Allí comienza el largo camino
de tratamientos para nuestros hijos.
¿Y los padres? Tenemos que aprender a enfrentar la
adversidad. Tenemos que aprender a Aceptar. ¡ESTE
ES MI HIJO! Y comenzar también a
prepararlo para una vida inclusiva. Aquí se torna muy importante y
necesario aprender a “detectar sus habilidades”. ¿En qué sobresale mi hijo?
¿Qué
podemos encontrar?...
Si
descubrimos sus “habilidades” … Podemos enseñarle, esto es DIFICIL
PERO NO IMPOSIBLE. Todos pueden aprender.
Es
necesario ponernos metas para poder llegar a tener hijos
Independientes y Productivos, por lo tanto FELICES.
Nuestros
hijos podrán escoger a sus amigos, sus alimentos, su ropa, sus diversiones … etc.
Tienen derecho a Amar y ser amados … a SER VALORADOS.
¿Qué
podemos enseñar los padres? LA VIDA
Habilidades de la vida diaria
Habilidades
Sociales
Reforzar
las actividades académicas o terapéuticas
¡Todo
lo que podamos! …
¿Cómo le enseñamos?
Tratándolo de acuerdo a su edad
Enseñándole
habilidades útiles y necesarias (funcionales)
Dándole
instrucciones cortas y precisas
MODELANDO lo que se va a enseñar
Reforzando
de manera natural
Enseñando
siempre de la misma forma
Confiando,
y sobre todo no olvidar alentarlo. Vos podés!
Conversando
con nuestros hijos. Ellos comprenden más de lo que imaginamos
Brindarles
recursos para comunicarse
Jugando
con ellos, les enseñamos a JUGAR
Que
interactúe con sus hermanos y demás familiares, con sus pares
Que
asista a espectáculos públicos, a realizar compras o acompañar en lo cotidiano
QUEDARSE
en casa refuerza el AISLAMIENTO
Analicemos
las Conductas Disruptivas, éstas tienen
un mensaje. Busquémoslo, pues con esa conducta nuestros hijos nos están
comunicando algo. Démosle herramientas para poder hacerlo.
Enseñémosles
a Generalizar, la habilidad
aprendida en cierto momento y para cierta cosa, debe repetirse en variadas
situaciones y momentos.
Recordar: “Mientras más HABILIDADES posean nuestros
hijos, menos conductas disruptivas tendrán” “A más HERRAMIENTAS COMUNICATIVAS menos
frustraciones”.
Continuaremos trabajando concretamente estos puntos,
para poder elaborar metas y estrategias de aprendizaje para las mismas, aplicables
a cada entorno, con la riqueza y multiplicidad de miradas que los grupos
implican, y la supervisación de quien
coordina esta actividad.